manuel yermenos

Pero te encontré..

 

Encontré mis pensamientos
en un rincón solitario del recuerdo,
donde aquellos instantes de la memoria florecen,
y en una primavera de angustias,
los sueños de esperanza se esconden..

Encontré en el silencio de la inconsciencia,
restos quebrados de mi alma,
huellas de su pasada existencia,
sentimientos inéditos,
brotando, donde guarda mi esencia,
en el amor, sus penas,
ilusiones oscuras,
anhelos fugaces colocados a orillas del ayer,
de lo que ya fue y se desvanece,
ahogados de crueldades presentes,
apodadas realidades,
al borde del abismo de un corazón vacío,
sin propósitos, sin sosiego,
sin paz, sin ti..

Encontré la verdad escondida en jardines de inocencia,
donde la ingenuidad es auténtica
y los frutos de la maldad
no se disfrazan de pureza, todavía..
La encontré en el ocaso de vidas breves,
agarrados de la mano de la muerte,
con la soledad de compañía
y nada que perder, sino la vida misma,
solamente..

Encontré la verdad como la encuentran siempre:
a medias, incompleta,
cargando la incertidumbre pesada de su identidad,
imposible,
vestida con cualquier sospecha,
eludiendo mis deseos perversos,
de verla desnuda,
su cuerpo genuino..

Encontré momentos sin tiempo,
condenados a aquellos segundos
que duraron para siempre,
resumen de una vida,
la vida en un instante..

Me encontré sin buscarme,
refugiado en la sombra de un poema
de nostalgia,
escrito con tus letras,
inspirado por tu ausencia..

Verso a verso,
tu nombre se esconde entre las lineas..
Beso a beso,
te recuerdo en oscuras noches frías..

Y en la frontera del olvido..
busqué en la distancia una mirada confusa,
y en cada mirada, la tuya perdida,
una voz sin sonido, y en todo sonido, tu voz..
Te busque en cada verso, en cada recuerdo,
Te busque en cualquier parte,
con un miedo sincero,
con un miedo infinito

De encontrarte..