Cuando estoy perdido tú me encuentras;
cuando lloro, me alegras;
cuando siento que no puedo más;
pienso en ti.
Cuando no sé a dónde voy, y siento que estoy solo;
cuando estoy cabizbajo;
pienso en ti.
Cada noche apareces en mis sueños, y ahí te lo confieso...
Pienso en ti.
Cuando caigo en la trampa, y todo es difícil de soportar;
cuando creo que a nadie le importa;
pienso en ti.
Cuando las cosas se ponen difíciles, y me siento derrotado;
cuando creo que todo ha acabado;
pienso en ti.
No importa qué pase ahora; porque siempre, hasta el final, pensaré en ti.
Cuando es tiempo de decir adiós, y una lágrima derramo;
sé que puedo mantener mi cabeza en alto;
pues pienso en ti.
Me siento débil ahora que te vas; pero sé que podré seguir;
porque en mi mente y en mi corazón.... Pienso en ti.