Jesús Lantigua

VIOLENCIA

 

 

El golpe expande el eco

sobre la frente.

Marchita la mirada,

de sal parece;

es un dislate

la angustia que en el busto

casi no cabe.

 

La mano que tortura

pega de nuevo.

Es brutal la manera

del desenfreno.

El rostro hermoso

revela los estigmas,

con el asomo.