Líquido vital
que corres apresurado
bajo el manto profundo
de mi suelo sagrado.
Con enorme alegría
te esperan, en la superficie
los humanos, plantas, flores y animales
de esta tierra que muere de sequía.
¿Quién ha osado
manchar tu prístina presencia
que envenena la esencia
de mi pueblo amado?
¿Por qué tu ausencia
de esos hermosos parajes
que otrora verde esmeralda veía,
en mustios y opacos se han transformado?
Ya no galopas
con furor entre las rocas
como antaño lo hacías
en los ríos de mi villa.
Ven, en torrentes
limpia el suelo,
también el cielo
que gris se ha tornado,
Ven, alimenta
al ciervo, también al poeta,
al niño y al hombre que se esconde,
porque tus entrañas ha contaminado.
Ven, baña mis campos
que los frutos se agotan,
que el aire se enciende,
aunque lo entienden pocos,
eres, AGUA, líquido vital
que necesita el planeta.
©Mirna L. Carranza Archila