Miras a tu alrededor
y solo ves desconocidos
por su forma de actuar.
Piensas que dirán unos a otros
y te entristecen las ofensas,
que ellos sabes convierten en reales,
por no preguntar y darlas por echas.
Te miran extraño,
como si fueras un bicho morfológico,
recubierto de un verde fosfato,
apestado de sensaciones malolientes.
No entiendo que después de la vida
y el nacimiento, que de tantos años
consiguiendo reventar el mundo
y sacar de la mina un trozo de carne
hambrienta, sin probar ni oler ese dia
porque tu lucha no es para ti,
no exista compensación ni entendimiento,
aunque solo sea en preguntar si es verdad.
Te convierten en el centro de sus miradas,
o peor ni saben de ti, no existes mas
y saludan con algo fingido por no explicar.
No comprendes porque esa maldad
untada de tiempo desgastado,
no puede ser solo un mal pensamiento,
quizás hubo quien indujo a esa enfermedad,
pero la mente solo se usa en el ser humano,
para poder rehacer flores estropeadas.
Las venas y neuronas torcidas
las convierte en reglas de vida,
en algo normal, sin importar
quien es ni quien a sido
la palabra torcida que han oído..
Solo cumplen su ley
y leen tu vida
sin mirar atrás
y menos en futuro porque saben
que ese no existe.
El se ira y será una brizna,
una lagrima sucia...
en sus zapato que limpiar
y todo pasará... a que más da
P.M Pedro Monroy Gemio