TRISTE NOCHE DE DOLOR
Con sus ojos enormes
llenos de asombros,
con sus cabellos espantados
y con el corazón en la mano.
Llegó hasta la cama
donde tu pequeña dormía,
quería escucharla, quería que gritará
quería que se moviera.
Mientras el silencio la mataba
la agonía de tomarla entre sus brazos
y verla sonreír una vez más,
era su mayor dilema, mientras peleaba con la puerta.
Aún con cara de terror, después de sentir temblor
después que la horas eran eternas,
su pequeña bajo los escombros quedó
mientras a gritos la destrozaba el dolor.
Cuando buscaba sin consuelo a su amada
entre los escombros que del techo se desplomaron,
en un mar de llantos y llena de desesperación
con gritos y lamentos pidiendo al señor.
Cargo a su hija entre su pecho
la acurrucó mientras le decía no llores mi amor,
ya está mamá contigo,
todo estará mejor.
Mientras la negación se apoderaba de su amor
de su corazón de madre,
en aquella trágica noche,
cuando en un temblor perdió su corazón.