Me tienes aquí,
En un olvido de pensamientos,
Un olvido eterno
del cual no puedo escapar.
Quizás, ya estas siendo feliz.
Quizás, sola quizás con otro hombre.
En el campo o en el mar,
Pero siendo feliz sin mi,
Siendo feliz sin mi compañia.
Oh, muchacha de caramelo,
Me tienes en un profundo olvido,
Te recuerdo en cada momento:
Tu frustrada mirada, tus ojos café,
Tu piel pálida como los polos de la tierra.
Oh, muchacha de labios sabor miel.
Aun espero, en tu olvido
Un encuentro fortuito