En una mugrosa mesa,
de una cantina de infierno,
entre copa y copa de licor veneno,
entre mi distancia y tu distancia,
entre rayos y truenos de mi alma,
con el corazón roto y sangrando,
voy extrañando tus besos,
voy añorando tu mirada.
Atacado por los celos ,
que me carcomen por dentro
como pirañas amazónicas.
Solo el licor veneno,
me calma y a la vez me mata.
Silvio