Esta mañana, por mi ventana miraba,
Una voz en mi oído susurraba, Amada.
Al pasar las nubes algodonadas,
Lucían en letras formadas el nombre de mi amada.
Entre nube y nube, el sol brillaba,
Con la luz de tu alma que proyectaba.
A la luz de la mañana,
Con mi corazón en llamas,
Solo en ti pensaba.
De este modo, me afectaba.
Con esa intesidad te amaba
A la luz de la mañana,
Solo el recuerdo asi quedaba.
Recuerdos del amor,
Que tanto yo anhelaba.