Volviendo a la estación de mi pueblo
Obligación de visita llevando respuesta
iniciando la tarde, partí calle abajo...
¡tu hijo de vuelta sin llantos de pena!
caminando en silencio diciendo
¡aquí vuelvo, diciendo presente...!
A orillas del pueblo, como siempre,
te encuentro...
Colmado de mundo, con años a cuesta
quisiera llenar la estación solitaria
- abandonada y triste llorando soledades,
como hogar sin sus hijos...
Llenarla de estrellas, de alegrías y risas
- como estación de llegada.
Borrar abandonos, soledades y olvidos...
Abrazarla con los sueños cumplidos
como estación al final del camino
- sin llantos ni penas , sonriendo contemplo.
Colmado de penas partí...hoy te miro
como muchos otros niños que algún día lo hicieron,
enfrentaron al mundo y al regreso, ya maduros
se unieron a ti, a tus recuerdos.
Lavantando sus manos con amores de hijos
- con cariño...en silencio
con sus ojos de lagos derramando sus aguas,
agradecidos, te abrazan...
Ya volaron y, lejos...Tú estación de mi pueblo
siempre fuiste recuerdo.
Fuiste tú, estación de partida
la que les vió llorara dejando su nido
-años lejanos, son pasado,
ya no lloran como antes lo hicieron,
hoy se ríen...te agradecen
vieja estación de mi pueblo,
hoy volvieron a verte...
Solitaria, sin tus carros y máquinas,
sin la gente, sin tus pitos de anuncios
de partida y llegada, sin tus ruidos
ni pañuelos al aire marcando partida,
secando las lágrimas...
¡Yo también como ellos,
te contemplo en silencio...te abrazo!