Queria irme, no caer ante el placer de un beso como aquel, apasionado, con amor y desesperado.
Intento huir,deseaba y no queria a su vez besarlo, porque sabia que bastaria para perdonarlo.
Pero él me conocía, sabía lo que me hacia sentir mujer, bastó que me tocara con la comisura de sus labios para que yo...bueno...para que yo sintiera el fuego de un beso deseado y a la vez odiado.