Soy el aroma que se va de la rosa
soy la rosa que brota del talluelo
soy el talluelo que se eleva del suelo
soy el suelo que dio vida a la rosa
que te entrego en tus manos, preciosa
cumpliéndose con ello, un anhelo
¡Cuántas cosas, Señor, cuántas cosas!
para poderle decir que la quiero.
Soy la lluvia que baña el sendero
soy el sendero donde dejas huellas
soy las huellas que siguen la estrella
soy la estrella que ilumina el cielo
cielo, sendero, estrella y rosas
lluvia, talluelo, huellas, y suelo
¡Cuántas cosas, Señor, cuántas cosas!
para poderle decir que la quiero.
¿Y el aroma que se fue de la rosa?
bueno, el aroma se quedó en su pelo.