Y el hombre creó a Dios
sus dudas sin respuestas
el origen y el destino
fueron contestadas
en la creación.
Pero las dudas crecieron
con todo lo sabido
crecieron.
Y el hombre creó el amor
sin explicación posible
amó y fue amado
sin preguntar, por qué.
Dios juzgó
lo bueno y lo malo
pero nunca pudo
hacerlo con el amor.
Supo de amaneceres en paz
y brumosas noches de duda
pero nunca sabrá
de esa boca enamorada
que no se rinde, ni vence
sin ser buena ni mala
solo enamorada.
Y el hombre creó el amor
en medio de la eternidad.