Mi corazòn acompañaba ,
los truenos de la lejanìa .
Y esta me traìa ,
tu dibujado rostro ,
que manos artìsticas ,
habìan gozado forjàndola .
Y el sentimiento ,
de sentirte tan dentro ,
me hizo besarte .
Y las caricias de la lluvia ,
procedieron a gozarse
con mi emociòn .
Que crecìa ,
como una inundaciòn ,
donde nada se perturba ,
solo sirve para que el terreno ,
sea màs rico .
Y este no deje de producir ,
lo que el cuerpo tanto necesita .
Y el alma se goza ,
en la tranquilidad de este .