GANAS DE LLORAR
He sentido unas ganas
de llorar tan intensa,
que mis ojos ardientes
al mirar se asustaron.
Y mis lágrimas sueltas
que estaban en las cuencas
no pudieron callarse
y a mis ojos brotaron.
Lloré toda la noche
sin poder contenerme,
sin mirar las estrellas
mucho menos la luna,
pasaron muchas horas
arribó la mañana
y mis ojos muy tristes
se cerraron cansado
porque estaban
sin lágrimas.
Anahilda Garcia
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