Mauro Enrique Lopez Z.

Despecho de amor

que tonto fui al enamorarme de ella,

como la llamaba y siempre respondía:

no puedo, tengo jaqueca.

Otro día decía:

estoy muy enferma,

mucho me dolía sus mentiras

porque anda de boca en boca

porque anda en los bares,

de tequila en tequila.

Ya tomé la decisión

de no buscarla mas

aunque me duela alma,

ahora es ella quien lo hace

y mi respuesta es:

no puedo,

porque tengo pereza de todo,

hasta darle un beso no quiero,

se incómoda mucho por eso

y yo feliz porque tengo otra,

y por sentir su enojo

al decirle no puedo.