No se que hay en ti mujer
que cuando pasas por mi vera,
me llenas de emoción
al verte tan linda
y no puedo plasmar el poema
a tu esbelta figura.
Y mis pensamientos
se vuelven de locura
como si fuera que estuviera
en la misma luna,
y con tus saludos y esa sonrisa,
caigo al piso y me dejas
como un niño en la juguetería,
al ver tanta hermosura
y no poder tomarla
por ser tan sencillo.
Se que no estoy a su altura.
Le ruego a dios
que pase igual cada día
para que alegre mi vida.
ro