La entrega del poeta
Si entregamos tan sólo amor,
Tendremos cantidad de puertas
Con gran honestidad, abiertas,
Venceremos fatuo dolor;
Nuestro poema superior
Es para las mentes despiertas,
Grandes verdades descubiertas,
Hechas coplas para el cantor;
Siempre demos lo que tenemos,
Si somos poetas de paz;
Con gran libertad expresemos:
Dichas, dudas, llantos y más;
Importante es que levantemos,
Desilusionarlos… jamás…
Me pierdo en el fuego de tu piel
Me pierdo en el fuego de tu piel,
Me hundo en el calor de tu regazo,
Y siembro mi campo, paso a paso,
Me embriago con néctar menta y miel;
Disfruto ese aroma de vergel,
Reposo mi testa entre tu brazo;
Busco con pasión aquel abrazo
Que torne en dulzura toda hiel;
Es grato vivir enamorado,
Vencer las corrientes de dolor,
Tornar lo procaz, inmaculado,
Gozar el instante de esa flor;
Amar como un loco enajenado
Que vive tan sólo, por amor…
Reina Erazo y Raul Gonzaga