Tengo tu vida en la mía
como piel, de cien maneras
tengo tu savia alegría
sembrada en mi vida entera.
Tengo tu ardiente aroma
como fuego en mis entrañas
tengo tu sombra en forma
de caricias que no me engañan.
Tengo tus profundas miradas
acechando mi esperanza
tengo tus pupilas doradas
en una bendita alianza.
Te tengo al fin en mis sueños
de noche como de mañana
tengo la dicha de verte
aunque lejos este tu alma