El mundo se manifiesta
porque existe en mi interior
y me desfila una orquesta:
¡tocando en nota mayor!
Sin los sentidos, afuera,
todo luciría oscuro;
y cual volátil quimera:
¡vivir sería un apuro!
Que se repartan los bienes
los avaros inconscientes
que abarcan entre sus sienes:
¡afanes de hombres dementes!
Lo material siempre rota,
aunque sea en forma tardía...
cada quien tendrá su cuota:
¡con o sin la rebeldía!
El depredador avanza
ciegamente hacia su fosa
porque por fin la esperanza:
¡cosecha nos dará hermosa!
Se resiste mi conciencia
a admitir tanta ceguera;
premiar veré la paciencia:
¡con frutos de primavera!
La razón es colectiva
y al pueblo le pertenece;
aquel que de ella lo priva:
¡de alguna forma perece!
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino