MÉNAGE A TROIS
Tengo un amigo querido
que es un amigo del alma,
con quien mi alma está en calma,
con quien comparto mi fe.
Nos queremos, ciertamente,
tomado en el buen sentido,
como se quiere a un amigo
que es amigo de verdad.
Un día, precisamente,
a una mujer conocimos
y con ella compartimos
momentos de felicidad.
Era bella cual la rosa
atractiva e inteligente
de simpatía envolvente
que entusiasmaba a los dos
Estábamos siempre juntos,
a todos las partes fuimos
juntos, nos divertÍamos
pasándolo muy bien los tres.
En el transcurso del tiempo,
cierto día advertimos
que por ella sentíamos
algo mucho más que amistad.
Sin apenas reflexión,
ese día descubrimos
dentro nuestro, percibimos,
que lo nuestro era amor.
Fue entonces, mi amigo y yo
resolver dudas quisimos,
y así fue que decidimos
saber de ella la verdad.
Declarámosle nuestro amor,
preguntando a cual quería,
y su respuesta sería
que nos quería a los dos.
Y fue así como sin querer,
del modo que no recuerdo,
suscribimos el acuerdo
de formar ménage a trois.
(c) J.C. Balagué Doménech
Barcelona, 4 agosto 2016