Max Hernandez

Un día cualquiera...

Un día cualquiera, ves salir el sol, y lo admiras como si fuera el primer día de la primavera...

Notas que su brillo es especial, está radiante, las nubes se retiran de buen talante, adoptando formas graciosas y adornando aún más el espléndido matutino cielo...

Ves que algunas aves han alzado vuelo, y alegres se dirigen con destino para ti, incierto. Hasta las ramas de los árboles cobran vida... Vaya, si son unas pequeñas ardillas, que corretean juguetonas y comparten su alegría...

- Buenos días! Te saluda alegremente un extraño, que va trotando y cantando. Lleva audifónos puestos, de seguro está escuchando alguna canción muy alegre, pues notas que su paso es ágil y fuerte. Apenas has respondido moviendo el brazo, y a lo lejos, un barrendero te devuelve el saludo, y como contagiado, también sonríe...

Parece mentira, pero a cada paso, sientes que tu alegría se ha contagiado. O te han contagiado.... Pero eso no importa, hoy será un día espléndido, único y memorable. Hoy estás vivo, y el mundo entero vino a saludarte...