Se oyen trémulos estómagos rugiendo
de infelices criaturas en penumbras
clases bajas crecen en el umbral
en anaqueles números en aumento.
La pobreza está vuelta pandemia
se esparce rápido en los vientos
en aguas blancas y excrementos.
¡Que dura se ha vuelto la vida!
Lunas llenas de largas angustias
lagunas turbias gástricas en soledad
escondido y escaso se encuentra el pan.
Duras jornadas de insuficientes calorías
otra vuelta del orbe con duro pesar
sonrisas cada vez menos se pintan
incertidumbre de civil guerra
u olas de oprimidos en rebeldía
aromas de temor e impotencia.
Pequeños organismos somos
que damos vida al global monstruo
dentro del operan colosales fuerzas
que colisionan brutalmente entre ellas
por busca de obtener máximo poder.
Veo a locura andar por la república
embriagados de poder, sediento por dominar
hacen lo que sea por triunfar
sin importar lo que el pueblo sufra.
Adolfo D\'Erizans.