Busco la mirada divina
Los ojos de una musa
El sentir la mañana
En una noche con luna…
Quiero traspasar fronteras
Hacer que me quieras
Y vueles en mis hogueras
De candela, con velas…
Sueños despiertos, de amor
Con el perfume de la flor
Esencias dueñas del olor,
Labios carmesí, lápiz de Dior…
Pasión de amores prohibidos
Ternuras de tus delirios
Y yo envuelto entre sueños
Muy vivos, en mis latidos…
Tú mirada embelesada mi niña,
Alimenta todo mi sentir;
Busco tu cuerpo, mi gacela,
En las partículas de tu elixir…
Y al ver tu mirada, amor Mio
Pierdo los estribos, mi flor
¿El porque pienso así?
Es porque te quiero, amor…
Y el amor es invisible, en color
Más vuelve loco, mis instintos
Y te pido un beso, de pasión
Amor dentro, de mis aposentos.
¡Tu mirada enciende la llama, que del amor necesito para sentir y decirte, lo que te quiero!
¡Dueña de mis noches y días, los que vivo pensando solo en ti, mi flor de caricias y mis sueños!
Modesto Ruiz Martínez / sábado, 10 de abril de 2010