Ella tenia veintidós
y yo de mi edad no recuerdo
solo se que ella despertó en mi
lo poético que llebo por dentro.
Hoy mucho se lo agradezco
porque escribo lo bonito que me dio
en aquellos días tan bellos,
¡ay ! como le escribo versos y prosas
y cartas de amor.
Todo lo tengo guardado
en mi cuaderno de vida,
y en las páginas de amor
ella es la dueña de mi corazón.