Tienta mi tiempo
déjalo caer
en tus manos de sueño
que descanse eternamente en tu mirada
que sea la luz de todas las mañanas.
Háblame con los silencios
juega conmigo a estar desesperada
se diluvio perfecto de este mundo
la mancha que no cesa de mancharnos.
Piérdete conmigo
hazlo de manera desigual
se fuego y mentira
se el cuerpo talado
como un árbol a punto de estallar
para ser usado como quiero.
Mírame silenciosa
besa la carne de mis labios
intimado a poseerte
como una fruta jugosa.
Yo aquí
espero tus brazos
para dejarme con la tranquilidad
de que aun sigo vivo.