Nos vamos haciendo viejos
sin siquiera darnos cuenta
el tiempo no está en venta
y se refleja en los espejos
Surgen las primeras canas
ya la frente se envejece
y nuestra vanidad perece
con las esperanzas vanas
Los sesenta ya han pasado
el ardor se ha terminado
el ciclo se ha acabado
pero tu algo has ganado
Pues te quiere una mujer
que acompaña tu vejez
y unos hijos que a la vez
te demuestran su querer
Los setenta ya han llegado
un poco más viejo estás
los años quedan detrás
con el recuerdo logrado
Ahora vienen los ochenta
y las piernas se te van
tu sentado en el diván
vas a llegar a noventa
Un soplo de aire divino
hoy te ha venido a buscar
en tu copa un buen vino
pues te tienes que marchar