Me hablaste
Platicamos
Con tu mirar
Pronto fuimos
Dos fusiones
De partículas
Unidas al universo
Y todo lo que hay en ello.
Abriste tus secretos
La puerta de tu alma
Me diste la entrada
A lo más profundo
Del mar de tu mirada.
Con cautela y sigilo
Una llave me diste
Muy divina ante mis ojos
Se llenaron de lagrimas
Por la alegría al saber
La confianza que tenías
Al sentir el latir de mi ser.
Paso el tiempo
Dios nos bendecía
Sentía que te tenía
En el oasis de la vida.
La odiosa rutina
Se hizo matutina
En el día a día
El marchitar
De tu bella sonrisa
Ahora tus risas
No me pertenecían
Yo solo inspiraba
Un fastidio en tu amar.
Lento fue el tiempo
Para mostrarme las vías
Donde eras una mentira
Yo no sabía
Que en el mundo
Otras llaves había
No era privilegiado
Mucho menos amado
Solo uno más
De tu colección
Esa que atesoras
En el fundo
De donde
un corazón
Debe Haber.
Me quedo solo
Solitario en el universo
Las estrellas me miran
Un poco afligidas
Porque ellas ya conocían
Las intenciones de tu ser
No hay consuelo
Para este duelo
Solo trato de elevar mi vuelo
Para verte lejos
Y que así mis heridas
Ardan menos.
Al final esa llave divina
La conservo todavía
No por alegría
Solo es para luchar
Contra el dolor
De olvidarte
Y recordar el daño
Que en mi causaste.