Me miro fijamente
revolucionaron mis sentidos,
un desenfrenado cosquilleo
recorrió nuestros cuerpos,
sensación de necesidad,
de sentir, de tocar, de mirar y acariciar.
Un deseo incontrolable,
Atormentando la imaginación,
Tome sus manos
sentí su calor interior, intenso y ardiente
Sus ojos gritaban,
Mi cuerpo se erizaba
El suyo temblaba
anhelaban pasión
No era amor, no
Semejanza o similitud.
Desnude su cuerpo,
Bese sus labios y más allá,
hasta su sombra
Sacie sus ganas y las mías
Sentí que deseábamos más,
Se acorto el día y la noche,
Hubo insomnio,
gemidos y mucho más,
Dos corazones agitados,
Espaldas marcadas,
No, no era amor,
Era deseo, una noche,
un momento de placer.
Era lo que muchos hoy buscamos,
Solo eso.
En resumen.
ERA SEXO