Con la tarde vestida de palomas
te bese y te di de beber el parque
de los besos de mi boca,
de mis ojos vestidos de instantes.
Te bese con alas de mariposas
y te di de beber el amanecer
en los sueños de mi boca
en cada beso que volvía a florecer.
Te bese con la luna
y te di de beber toda la noche
bajando las estrellas una a una
hasta vestirte de flores.
Te bese con mis manos
vestida de primavera
y te di de beber mis abrazos
hasta vestirte de poemas.