Aún no cesa esta tormenta,
esta lluvia de recuerdos y añoranzas
que baña mi rostro y me atormenta
agobia a mi corazón sin esperanza.
Y arrecia aún más todos los días,
la soledad en mi alma aumenta
haciendo de las alegrías mías
una sonrisa cada vez más lenta.
En dónde está la primavera?
hace tiempo se fue como una lanza
y aquella alegría verdadera
murió hace tiempo y ya no alcanza.
GUIVEL