Siempre he imaginado mi pensamiento como una red de circuitos entrelazados hasta el infinito de forma tan compleja que es imposible de desentrañar.
Siempre he imaginado a mis neuronas interconéctandose continua y difusamente, lanzando chispazos cuando se me ocurre una idea brillante o emitiendo una imagen o una sensación espontánea e inesperada.
Siempre he imaginado mi cerebro en una ferviente actividad, con un trabajo constante, arduo, captando datos, situaciones, sensaciones, de las que no siempre soy consciente.
Y allí se encuentra toda la información de mi vida : lo que he aprendido , sentido, gozado y sufrido.
O se encontraba…
Porque intuyo que su capacidad de almacenar información va disminuyendo , que cada dia se escapa algo de este entramado de memoria…
Hace varios años que estoy jubilado.
Ocupo mis horas con añoranzas de otros tiempos, intentando recordar mi vida como médico,mis compañeros, mis pacientes, los casos problemáticos, mis conflictos., lo que ocupó mi vida de forma plena, durante más de 40 años
Lo que fue mi vida, porque yo no sé si ahora estoy viviendo..
Tras el último día de trabajo me apunté a cursos de todo tipo : historia, tertulia literaria , fotografía , cocina para tercera edad...
Leí todo lo leíble.
Quedaba a comer o tomar algo con mis amigos o con mi familia, viajaba lo que podía,caminaba kilómetros o iba al gimnasio
Pero en este punto de mi existencia mi mayor placer es sentir el calor del sol sobre mi frente , sentado en un banco del parque, leyendo el periódico o viendo pasar a la gente o simplemente recordando o intentando recordar…
Y entonces imagino mi cerebro , no lleno de circuitos , sino como grupos de pequeñas láminas de colores, malva, azul, rosa, superpuestas y muy juntitas, como si fueran hortensias…
Y sonrío ,tranquilamente, aunque no recuerde lo que quería recordar...........
20/03/2016