Juntos éramos un bello jardín
hacer el amor convertía todo en primavera
mirar tus ojos mientras me tocabas
encendián en mi pecho una fuerte hoguera
Pero el tiempo pasó y el invierno llego
junto a él los fuertes vientos del norte
que avivaron tanto la hoguera que me quemó
quemó nuestros cuerpos ahondados de amor
Llego un fuerte frío que todo apago
solo quedaron llagas en mi corazón
y forzado hacia la aurora boreal caminó
mientras el tuyo al lado austral se dirigió
No era un amor que se volvería a encontrar
no era un amor viviente en un mundo circular
si no en un jardín plano, ahora frío y despoblado
las tierras habían quedado áridas y dificíles de sembrar
nadie podía ahí regresar
Sin embargo cada noche nos cubría la misma luna
el mismo manto de estrellas lejanas
que al mirarnos quedaban melancólicas y angustiadas
al vernos extrañarnos tanto estando tan lejanos
y saber que estar juntos solo lograría incendiarnós.
Flor Hdez. México.