Desperté en tu piel, llena de caricias y besos.
Desperté en tu piel, con el aroma del amor
y el rico sabor que emana de todo tu ser.
Desperté en tu piel, entrelazados tu cuerpo
y el mío, entregados en un mutuo placer.
abandonados, al unísono en un torbellino
de besos y caricias, cuando tú y yo nos
entregamos en ese loco y desenfrenado
querer, hoy amanecí en tu piel.