Si hubiera sabido ser
tan linda como una paloma
¡tendría los ojos color miel
y la boca como una amapola!
¡Ay, si hubiera sabido ser
tan bella como una paloma!
Sería dulce como la melaza
llena de amor y de fantasía.
Y ¿Te acuerdas de esa noche
que los dos nos conocimos?
¡Ay, mi amor que dijiste!
¡...Qué dichoso seré cuando
me despose contigo!
Y, me temblaban mis piernas
como un ave adolorído.
La luna nos veía desde cerca
desde aquel montecillo de olivo.
¡Y, te rrepetí cuantiosas veces!
¿Cúando te casarás conmigo?
Yo, construí ilusiones, esperanzas
y rebosé mi ser de suspíros.
¡...Pero! ¿dime mi amor?
¿ Cúando te casarás conmigo?
Autora
María Luisa López Pisú