Extraño tus ojos tan tiernos
entregados a observar
cada uno de mis detalles.
Ver los mundos que hay en ellos,
deslumbrantes, eternos,
quiero vivir siempre en esos luceros.
Extraño tus caricias
recorriendo mi cuerpo,
sintiendo ñañaras por dentro.
Sentir el erizar de mi piel,
descubrir sensaciones
conociendo nuestros cuerpos.
Encontrar tus puntos débiles,
rozando la esencia de tu belleza.
Ser el complemento que te llena.
Extraño sentirme alegre,
escuchar tus carcajadas.
Saber que soy importante,
ser parte de alguien,
y que ese alguien seas tú.
Solo eso importa en mi ventura,
ser el suplemento de tu alegría.
Alcanzando con ella la mía cada día.
Quiero olvidar este mundo,
como en aquel tiempo lo hice.
Volver a entrar en el tuyo
donde puedo ser feliz en verdad.
Extraño ver como contemplas mis movimientos.
Penetrar tu corazón y sentir cada uno de tus sentimientos.
Saber que me perteneces en cuerpo y alma, en muerte y en vida.
Tu inconscientemente no te das cuenta que te pertenezco.
No comprendes de la historia grabada en nuestros pechos.
Estamos entrelazados desde el inicio del tiempo,
el destino no tiene influencia en ello.
Solo tú y yo tomamos la decisión de volver a juntos estar,
y en el camino del infinito libres podernos amar.
En verdad te extraño,
cada día se me hace largo,
no por el trabajo que hago,
ni por mis diversiones extrañas,
simplemente porque no te tengo.
Estas lejos donde no te veo,
en la lejanía de tu cautiverio.
Sin mis garras que arañen tu espalda,
ni mis besos que alejen a las alimañas
o mis abrazos que te atrapen
y no te suelten ya nunca jamás.
Sabes extraño oler tu piel,
saborear cada parte de tu ser.
Disfrutar de tu hermosura tan ingenua,
saber que cada parte de tu cuerpo y de tu alma,
están conectados a la mía.
Que yo soy tú en mujer y tu eres yo en hombre,
suena raro, pero es la realidad,
de nuestra naturaleza.
Somos iguales y diferentes,
pero más de lo primero siempre.
Al besarnos nos complementamos
nos regalamos amor
y somos una perfecta unión.
Tu tan todo y yo a veces tan nada.
En verdad te extraño como no tienes idea.
No te llamo por que se que tal vez eres feliz en otro lado,
no te hablo porque me da miedo,
me da miedo encontrar un sentimiento distinto,
conocer realidades diferentes a las que imagino y siento.
Pero al final confío en el recuerdo de tu mirar,
en que cada acción llena del significado de amar,
Que en aquel tiempo me regalaste sin pestañear.
Quisiera tener millones de fragmentos del tiempo,
donde tú y yo seamos solos los dueños,
manipulándolos para ser eternos.
Donde no existan fronteras para estar unidos,
y así siempre tomados de la mano,
disfrutar de nuestra mutua compañía,
viajando por el mundo,
descubriendo universos,
siendo infinitos,
que no importe nadie ni nada,
ni cómo, ni cuándo,
solo tú y yo,
tomados de la mano amándonos.
Somos la perfecta unión del amor,
eso eres, eso soy y por eso te extraño.
Te extraño eternamente te extraño.