La moneda tiene dos faces,
con equivalente valor,
así en la vida y el amor,
sin atañer la faz que agarres,
equivalentes serán dicha y dolor.
Y serán estadios inestables,
cuál moneda al aire lanzada,
que nunca caerá parada,
aunque con cuidado la lances.
Lo mismo valdrá caída de canto,
siempre deseada y apetecida,
tanto igual, el amor y la vida,
nunca perderán su encanto.
Autor: Víctor A. Arana
(VICTOR SANTA ROSA)
Septiembre 4 del 2016.