joanmoypra

Cuando la vejez asoma

CUANDO LA VEJEZ ASOMA

En verdad que es muy duro 
cuando la vejez asoma, 
y observamos cual obscuro 
se convierte lo maduro; 
pues hasta pierde el aroma 
que teníamos por duro, 
al franquear aquel muro 
que ahora nos parece broma, 
en un destino que te entrona 
hasta cobrarte el seguro.

¡Pobre quien se posiciona 
o encerrado en su capullo, 
piensa que solo es murmullo 
cuanto ocurre en su persona!, 
sin pensar es ese arrullo 
que La Parca le ocasiona, 
hasta convertirle en suyo 
pues a nadie esta perdona; 
ya que la misma ambiciona 
llevarnos a todos al trullo, 
como estrellas de su corona. 

Al escondido ella encuentra 
su apetito es insaciable, 
siempre concluye la cuenta 
con su lista interminable, 
y donde lo más probable 
que en la puja de esta venta, 
nadie puje por la oferta 
por ser esta inviolable, 
al tener todos palpable 
que esta es: ¡La herencia nuestra!

Joanmoypra