Te conocí en un sueño que tuve anoche
Fue una imagen tan clara de tu bello rostro
No recuerdo bien de qué se trataba
Solo que en ese sueño tu a mí me amabas
Tu pelo de un precioso rubio cristalino
Tus ojos azules como el horizonte marino
Y ese acento tuyo tan sereno y cauteloso
Era tan suave como ronronear de un felino
Ya no me acuerdo de nada en absoluto
En mi mente solo gira tu bello canto de habanera
Y ese momento en que sutilmente dijiste te amo
Dejando simplemente que la situación fluyera
Princesa sé muy bien que tú no existes
Soy consciente de que nunca voy a verte
Pero en mi mente vivirá para siempre
Ese sueño en que me amaste hasta la muerte