¡Oh! Se van los amantes lúgubres,
a la fatalidad de su coloquio,
se ahogan ya de prisa
en su lagar ¡las brujas en la hoguera!
Se abrasan insolentes sus diatribas,
¡fuegos carmesí! ¡lujurias!;
pero ella, la Cleopatra, se ha vuelto impura
en sacrílega arrogante calma ¡explotó su rabia !
convergieron las sublimes ansias
a su humedad quemante,
a su piel de hiedra
¡la injuriosa hiedra!
¡Ah! su Venus en los éxtasis era hoguera,
su abertura mulata delicias exponía
¡Las expuso ansiosa ante la virilidad
que brama y que destaza!
¡Como Nemrod en la caza!
¡Si era espada candente,
el hierro inclemente del verdugo amante!
Y al extasío confundieronse,
los desnudos cuerpos,
en la plenitud de la erupción orgásmica,
los ayes del amor al viento
y la pasión ingente;
entrelazando sus desnudos,
copulando los amantes,
como áspides malditas,
consumidos por el fuego,
¡Oh! al devastador coloquio ,
el compulsivo éxtasis
en la penetración urgente…
11-08-16
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