galuth ballesteros

Las luciƩrnagas.

 En una callejuela de esperanzas y sueños

reunidas las traviesas niñas de mi barrio;

una tarde crepuscular iba con nosotras

 y un hermoso espectáculo nos  invadió.

 

Un recuerdo hermoso circunda por mi mente

aquella inquieta caravana de  estrellas reales;

ese cortejo de luz  danzaban intermitente

en la noche obscura nos daban señales.

 

Nos sorprendió mirar este suave destello

de la   fosforescencia de aquello querubines;

halagaron

 

  a nuestro corazón y sentidos

deleitándonos de esos pequeños serafines.

 

Momentos  inolvidables de nuestra infancia

al trasladarnos a ese santuario de fantasía;

todas  jugamos  con ellas a las escondidas

dejándonos estelas que duran todavía.

 

La estancia de ellas es natural y repentina

 como aire de inspiración de las poetisas;

como la luz de las  luciérnagas que son ciertas

y con el mensaje mágico de  hadas madrinas.