Amor que me dijo adiós
y voló como los pájaros
para atarme a un nubarrón.
¡Ay amor que yo te amara!…
Era para mí tan fácil
orilla por ti sesgada.
Entre tus brazos perdida
me encontré una tardecita
y me maldije mezquina.
En estas manos feliz
quedó tu dulce recuerdo
como un cuadro todo gris.
Tengo en mis ojos tu llanto
en mi cuerpo tu calor
y para siempre el espanto.
AMALIA LATEANO