caballo negro

EL INCONFORME.

Soy el inconforme, el del vacío infinito,

el hombre de la melancolía constante,

que añora lo que no tiene forma,

ni sabor, ni olor, ni color, ni nombre.

Soy la eterna búsqueda sin sentido,

el hombre que no encuentra su camino;

soy el que nada quiere y todo desea,

el que nada tiene y todo lo ambiciona;

al que no le es suficiente un amor,

ni varios, los quiere todos,

y el amor del mundo le parece demasiado;

y ni el negro, ni el  blanco, ni el gris le satisfacen.

 

No quiero el eterno descanso,

ni añoro la constante lucha.

Me complace la certeza de la incertidumbre,

y me mata la incertidumbre de la duda;

el amor de las mujeres me parece demasiado,

pero añoro el de una sola que me ame.

 

Soy aquel que a si mismo se niega

y a  pesar de pensarse desgraciado,

soberbio, loco, superior o enamorado,

solo tiene fe en la nada,

y aunque cree en Dios no le ama.

Sabe que es Dios el camino correcto,

pero lo siega la duda de si merece el infierno.

 

Soy la melancolía constante,

el eterno buscador de la felicidad,

uno sólo entre tantos, entre todos,

soy él fantasma que todos llevamos,

él solitario…. él inconforme.