Te me fuiste una tarde de noviembre,
En medio de las sombras de una nube que cubría el sol,,,
Pero olvidaste entre los afanes de tu huida: mi cobija y unos libros viejos
Que me dejaste tirados en un rincón
Te fuiste en medio de la fuga impertinente de tus pensamientos errados
Que te decían que con él serias feliz,,,
¿lo eres?... !dudo que con èl sea mejor¡
Ahora y en medio de la soledad obligada a la cual me has condenado
Te conjuro en el destino de tus pasos errantes por el mundo del amor equivocado:
Que no serás feliz en medio de unos brazos extraños que ni conoces
… pues los míos ya has amado…
Y no podrán otros besos fascinarte
Pues recorrerán los surcos que marcaron mis labios en tu traicionera piel de fondos blancos helados
De sueños incomprendidos y jamás consumados,
En tus labios desdichados por no ser vírgenes de los nuevos besos usados que utilizas sin mi sabor,,,
te conjuro y te condeno a vagar sin piel y sin ansias sin deseo y sin palabras,
Más que tu cuerpo vacío, manchado y perturbado… sin esperanzas…
Como alma en pena en medio del desierto de los seres,
de las miradas, los insultos y las desdichas…
Te condeno así como me condenaste a vivir sin tu aliento fantasmal de amor falseado y pasión marchita
En medio de esta muerte viva en que me dejaste
Y se feliz mientras puedas hasta cuando la soledad de mi destino te alcance
Y cobre la deuda que él por compensación en su ley imparte...
Mi diosa eterna
…mi mujer errante…