Lamento no haber pedido que te quedaras,
Pero de que valdría, si ya sabia que no me amabas,
Disculpa por no escribirte cartas,
Ya que crei que era suficiente con las llamadas.
Aquellos dias en que sonreiamos al atardecer,
Crei que eramos infinitos y que jamas ibamos a desaparecer.
Nuestras manos siempre juntas,
Se alejaron aquel mayo bajo una triste luna.
Lamento los aniversarios olvidados,
Y por no llegar a tu casa con algunos regalos.
Lo siento, se que me equivoque,
Pero prometo que en tu despedida tambien lloré.
Fue tonto de mí parte al creer que siempre iba a ser el primero.
Perdoname por guardarme los te quiero.
Fui tan ingenuo al pensar que jamas te perdería.
Lo siento, crei que siempre me amarías.