QUÉ IRONÍA
Sin decir esta boca es mía, te retiraste
Hacia la eternidad de la otra vida,
mis quereres, hechos añicos huérfanos quedaron
Mis sentimientos colgados a ti siguen.
Cuando te pienso, la humedad de tus labios,
presente en los míos está,
arrastrándome,
al universo de la creación, donde
se escucha el canto divino,
de los enamorados.
Cuanto te amé esposa mía y todavía,
te amo.
Jamás de los jamases te olvidaré.
bambam