jorge enrique mantilla

EL SIN AMIGOS, pobre desgraciado

EL SIN AMIGOS

Pobre desgraciado

 

Deambulando de tumbo en tumbo

Sin rumbo fijo, con mirada de osadía

Sin eco que retumbe la misericordia de su cobardía

Cabizbajo y ojeroso, el sin amigos, llora su rebeldía

 

Nadie lloró su muerte de aquel pobre y solitario desgraciado

Seres que viven en un desespero, por siempre condenados

De esos que sobreviven y escasamente mueren olvidados

En medio del dolor y la orfandad, sin libertad, por siempre confinados

 

El sin amigos, nunca es socorrido y menos invitado

Nunca se les tiende la mano y a la mesa convidados

Al acecho, la incertidumbre los persigue sin ser escuchados

Llevan en su espalda, la marca de aquel que siempre ha sido maltratado

 

El sin amigos, de todos odiados y de los laberintos repudiados

De sus dolores y quebrantos, nadie acude, de sus gritos desesperados

La indiferencia los acosa, de repudios, insultos vociferados y causados

En solitario llora su pena, de amargura, sin amigos recordados, ni soñados

 

Del inclemente azota, los atardeceres, sin rumbo ni porvenir

La oscuridad de la noche acecha, la inseguridad de seguir

Olvidado de viejos amores, de amistades en solitario proseguir

Lleva a cuestas, la carga de aquel miserable, que no para de sufrir

 

Sin amigos no podrá vivir, de éste mundo quiere partir

Plasmar con llantos sus andanzas, que por egoísta, dejó de escribir

Aturdido y sin razón, la desgracia lo persigue, sin poder elegir

La vida se marchita, dando paso al dolor, sin fuerzas poder combatir

 

El sin amigos, solitario y triste, azota la calma de su desespero

Como pájaro perdido, sin ramas que sostengan su nido

Maltrecho y herido, va rumbo al desquicio, de sus andanzas conseguido

Su cuerpo desapareció en el olvido, en fétidos olores, convertido

 

Joreman” Jorge Enrique Mantilla

Bucaramanga sep 17-2016