Ese hombre cuya estampa es de príncipe
con esos ojos que con solo parpadear ipnotizan
con una boca tan masculina que derrama versos
de deseo y delirio...
Ese que en una sola palabra matiza los colores
que nacen en el silencio del corazón, en la soledad
de un alma encerrada en la melancolía...
MARIA PUREZA GARCIA