En la platanera corre mi soledad,
Brizas de encanto que acaricia el tejado de mi hogar,
por el Camino de mi ensueño
abrigando en la peña de mi cauce,
encanto Ombligo de nobleza que con callada manera
bajan en sus aguas de quebrada
Cristalinas y puras,
Refleja el sol su belleza
Y con cruda manera suelta la lluvia
Un roce de caricia
Que tocan gotas a los pétalos
de las flores con la que mis ojos aclaman
como acariciando al corazón mi alma.
Bella mañana recorre el canto de las aves,
Y sin decir palabras brota un té amo
Con el vuelo de las mariposas como testigo,
De la nada llega un caballero
con su fiel sombrero y abrigo a buscar su fiel ternera,
fiel amiga que regala su oro campesino,
me hace recordar con grata manera el cariño que mi corazón espera,
Caminó sobre el campo del dulce néctar de la vida
La alegría de un amor eterno
de un eterno amor
Corremos ladera arriba,
y con el zumbar de los pinos
Decorando la montaña y escondido entre los cafetales un dulce aroma,
Me envuelve a un deseo terrenal.
De sentirme vivo, del saber que existo,
Viéndose el paisaje ante mis ojos
Un horizonte que no tiene razón
Con la caída de un sol naciente
Brillando la estepa de mi corazón
un manto de cesped que esconde
la mas tierna muestra de las ganas
que siento por ti,
Y acabase el día,
Conmigo en medio y el amor al final
Acabase con tardía noche
en una luna solitaria,
Que hipnotiza hasta la más débil rama del árbol
que eterna tiene en su gloria,
Y Acabase con la luz de una luna
Callada que toca mis más bellos pensamientos
y hace que aflore en la siguiente mañana con la bondad
De tu amor,
Buscándote estoy
buscando en el pasaje de mi cielo
Buscado amor que zumba en la eternidad
y brota poco a poco su néctar
endulzando a mi alma
Y como flor de la mañana se refleja en ti
En un té amo de belleza
Delicadamente en un té amo.
(Colombia , autoría tatán ©)