Madre mía,
De eterno corazón, de hermosos
Sueños,
Que me miran desde lo más hondo
De tu corazón.
De tu alma,
De tu eterna compasión.
Ese vello momento en el que tu,
Madre mía eres mi más dulce
Felicidad.
Eternidad,
Cuando me tiendes
Tu mano,
Para darme tu amor.
Para que nunca me falte nada,
Para que en mis sueños, nunca desaparezcas,
Hoy te digo madre mía. Te anhelo,
Te quiero,
Te amo.
Te extraño,
Cada minuto
Que no te tengo junto a mí.
Mi dulce amor permanece
En tu alma y corazón,
Mi vida,
Es para enorgullecerte
Para hacerte feliz…